Es Elisa Ossino la diseñadora de los perfiles suaves de Honoré, un sofá de formas orgánicas con el atractivo de una escultura, como el puf que lo acompaña. Suficientemente pop, su asiento es un énfasis de estilo, curvado y pleno, el respaldo es un signo gráfico circular. Disponible de dos tamaños, se sostiene sobre patas de madera torneadas, que recuerdan el interés por recuperar las elaboraciones artesanales.